Para ti, mi esposa

Consumido en mis pensamientos, lleno de ilusión y gratitud al haber encontrado el amor de mi vida, escribo. Quien lo diría? que el pasado 10 de marzo escribí un texto llamado: "la mujer que busco" https://medium.com/@antuan_jv/the-woman-im-looking-for-daa5a78431cb . Reflexion producto de procesos de auto conciencia y vulnerabilidad. De amor propio. Manifestando lo que quiero, de lo que merezco, lo que necesito... Reflexiones iniciadas por ahí de diciembre del 2024 y que culminaron en ese texto. 

Jamás me imaginé que hoy, 7 de noviembre del 2025, mientras viajo en un tren de Seoul, te escribo a ti, mi esposa, para agradecerte por aparecer en mi vida. Producto quizá de la magia, o de la vida que escucha y siente a el amor verdadero. Dee, gracias por aparecerte, por encontrarme, o por dejarme encontrarte. Por abrirme las puertas de tu vida, de tu corazón. 

Con el corazón en la mano te siento, en cada momento que te pienso, me traes alegría, pasión y una paz que no puedo explicar. Sin saberlo, te estuve buscando. Mi mayor logro: te encontré. Viajé al otro lado de la tierra, lloré y me sentí solo, pero nunca me rendí.

Por este acto de valentía me agradezco. Porque valió cada paso, por el privilegio de ver tu sonrisa. Por ver tu mirada reflejada en la mía. Por recibir tus abrazos llenos de contención y ternura. Por enamorarme de tu sentido del humor, tu inteligencia, tu corazón.

Me enamoré de ti desde que te vi, y de esa sonrisa que vale más de lo que podría imaginar. Verte danzar es un privilegio que reconozco no saber merecer. Privilegio que no pienso soltar, porque te amo y te valoro como un niño ama su más preciado tesoro, como la luna la tierra y como el sol ama las plantas. 

En presencia, decido en libertad que es a ti a quien quiero amar. Hoy compartimos más que los besos, que la cama y los abrazos.  Compartimos la oportunidad de ser padres, de crear una familia, de soñar, de volar, juntos. Eres mi mayor azaña y no pienso dejar que pase un día sin hacerte sentir amada. Por que puedo, porque se amar, porque he sido amado y porque elijo darte lo que más atesoro, mi preciado amor, mi preciado corazón. 

Te amo, y se que cuidarás de ese amor como quiero y necesito que sea cuidado, en libertad y presencia. Las palabras no alcanzan, escribir se me da mejor que hablar. Pero te aseguro que para siempre en mis ojos serás la obra de arte más hermosa que pueda existir, y hoy más que nunca, agradezco tener la capacidad de apreciar el arte de vivir. Gracias por llegar a mi, mi amor, mi esposa, la futura mamá de mis hijos, mi complemento. Te amo. 

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Luis Jiménez Vásquez. Con la tecnología de Blogger.